El laborismo en el poder en 1924 desde la óptica de Luis de Zulueta

IMG_20170730_111316_840

En los últimos tiempos tenemos abierta una línea de investigación sobre el impacto que ejerció el ascenso del laborismo en los años veinte y treinta en el socialismo español, y cuya prueba estaría en la cantidad de espacio que El Socialista dedicó a la evolución del Partido Laborista en aquellas décadas.

En este trabajo nos acercamos a la opinión de Luis de Zulueta. En realidad, en este caso no se trata de un político socialista, aunque sí de izquierdas. Zulueta compartirá algunos aspectos generales con el PSOE en relación con el laborismo, especialmente en relación con el comunismo, pero nuestro protagonista también haría otras consideraciones sobre el liberalismo a propósito de los laboristas en un análisis que nos parece harto interesante para comprender la alteración del mapa político británico en esta época, y que le acerca a una parte más concreta dentro del socialismo español, como tendremos oportunidad de comprobar.

Luis de Zulueta (1878-1964) fue un destacado periodista, intelectual y político republicano, llegando a ser ministro de Estado en la Segunda República. Pues bien, en El Socialista del día 13 de febrero de 1924, se insertó una columna debida a su pluma con el título de “La Libertad se ha hecho socialista”.

Zulueta reflexionaba sobre la coincidencia de la muerte de Lenin con la llegada al poder de los laboristas en Londres, y cómo aquel había sido especialmente violento con la formación política británica. La razón de esta crítica para Zulueta estaba en el hecho de que los laboristas, en realidad, eran liberales porque creían en la libertad. Para Lenin los laboristas habían dado un de balón de oxígeno al liberalismo o, lo que es lo mismo, una especie de derecho de asilo al “liberalismo burgués” en el campo del proletariado.

Zulueta opinaba, desde su defensa de un concepto de la libertad no vinculado a la burguesía, sino como ideal humano, que, en realidad, el reproche de Lenin se convertía en un elogio del socialismo británico, reconociendo que habían dado albergue al liberalismo en el seno del “campamento del trabajo”, pero afirmando que el liberalismo histórico, en alusión al anterior, solamente había sido una etapa del objetivo de emancipación. Zulueta no veía ninguna contradicción entre el liberalismo y el socialismo porque había un socialismo liberal y humanista. No olvidemos los lazos de cercanía de Zulueta con el gran defensor de esta línea de pensamiento en el seno del PSOE, y que no era otro que Fernando de los Ríos.

Por otra parte, Zulueta se preguntaba qué harían los liberales a partir de ahora, los que habían sido el otro pilar del bipartidismo británico hasta ese momento. La actitud que tomaran era de una gran trascendencia para el político republicano español porque podía convertirse en referencia para el resto de partidos liberales europeos. Los liberales ahora habían apoyado a los laboristas para impedir a los conservadores acceder al poder, ya que se estaba viviendo un momento especial en la política británica con tres partidos fundamentales, pero que no conseguían la mayoría suficiente para gobernar solos. De la misma manera, los liberales, como luego sabemos nosotros, podían retirar su apoyo a los laboristas. Para Zulueta el liberalismo tenía una delicada posición: ¿giraría a la izquierda o a la derecha? Si optaban por la primera opción podían contribuir al desarrollo de un laborismo que podríamos considerar de las palabras del político español como más humano, más cultural. Pero si se decantaban por la segunda opción, era fácil que el liberalismo viera un crecimiento tal del laborismo que terminara convirtiéndose en hegemónico. Al final de este largo período sabemos que el laborismo terminaría desalojando de su puesto al liberalismo. No cabe duda, como apuntábamos al principio, el intenso interés que tienen estos análisis contemporáneos de hechos que estaban cambiando el panorama político.

Eduardo Montagut

Hemos consultado, como fuente, el número 4685 de El Socialista.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


*