RECUPERACIÓN DE LA MEMORIA HISTÓRICA DE NUESTRO INTELECTUALES: ÁNGEL GARMA
Los acontecimientos desarrollados en España durante la Guerra Civil y posteriormente el quehacer de aquellos que escribieron nuestra historia sólo de un modo, el del vencedor, realizaron un borrado de infinidad de nombres de la intelectualidad más puntera de nuestro país, entre los cuales estaba, Ángel Garma.
Pero gracias a la acogida del pueblo argentino, la semilla del trabajo psicoanalítico de Garma hoy sigue viva y ha podido volver a ser rescatada de nuevo en su país de origen, España.
La idea y el proyecto de abrir un espacio psicoanalítico en el Ateneo de Madrid dentro de la Agrupación Especial Ateneísta que lleva su nombre junto con el apoyo incondicional de la Agrupación Agustín Argüelles, se funda primero en la recuperación de la memoria histórica de nuestros intelectuales perdidos y en segundo lugar por el deseo que la filosofía del espacio coincidiese con la impronta del talante que Garma aplicó a su trabajo.
Este proyecto se ve hoy recompensado de una forma muy entrañable, con la invitación de la Sección de Psicosomática de la APA (Asociación Psicoanalítica Argentina) a unir ambos espacios invitándonos a explicar la figura de Garma y el trabajo que desde esta Agrupación estamos realizando para sacar del olvido a uno de nuestros más prestigiosos psicoanalistas, dentro del marco de su próximo Congreso de Psicosomática que tendrá lugar los próximos 1 y 2 de septiembre en Buenos Aires.
La importancia de los factores psicológicos en la enfermedad, se han puesto de manifiesto a lo largo de la historia, si bien no aparecen “construidos” como etiopatogénicos hasta hace poco más de un siglo.
Siempre hubo Medicina Psicosomática a lo largo de la historia, pero sólo en los últimos años hay Patología Psicosomática, porque hay Psicoanálisis. Es decir, el paciente siempre fue visto como hombre enfermo, pero sólo desde la aparición del psicoanálisis se pudieron introducir los aspectos emocionales y personales como factores etiopatogénicos del enfermar.
Aunque Platón afirma que un error extendido entre los hombres es el de querer emprender separadamente la curación del cuerpo y la del espíritu. Y esta postura la retomó y reelaboró el hilomorfismo de Aristóteles, según el cual, cuerpo y alma formarían una sola sustancia. Estas intuiciones de Platón y de Aristóteles hubieran podido desarrollar una patología psicosomática, sí, pero los médicos griegos y entre ellos Galeno fueron fieles al craso naturalismo del Corpus hipocratium por lo que sólo pudieron ver la enfermedad como un desorden de la naturaleza, quedando las ideas de Platón y Aristóteles entre los filósofos.
A ello, en España, a partir de los años 40, se añade una alianza de poder entre estado e iglesia con preponderancia cultural del cristianismo en todas las instituciones, lo que conlleva a los médicos, educados en las universidades españolas con la medicina de galeno, a no saber llegar hasta una patología psicosomática, al seguir elaborando la patología desde el supuesto de la mera alteración corporal. Supuso un enorme retroceso cultural para el psicoanálisis y la psicosomática en España.
Supuso el callar del psicoanálisis, supuso la prohibición de los libros de Freud y la persecución de cualquier forma de pensamiento libre y el advenimiento del conductismo a la universidad como único método de trabajo.
Recordemos cuando Serrano Suñer, ministro del Interior en la España franquista solía decir: “fuera de España no existen españoles”.
Por esta frase, considero de especial relevancia la oportunidad de hermanamiento que la Asociación Psicoanalítica Argentina nos brinda de poder traer el recuerdo del trabajo del psicoanalista español Ángel Garma, cuyo capítulo de la historia del psicoanálisis y de la psicosomática, jamás hubiese tenido lugar en aquella España.
Recuperar el psicoanálisis, reavivar la psicosomática, recuperar el nombre de los intelectuales perdidos y demostrar que todo está vivo y por hacer, ahí estamos en el Ateneo de Madrid desde la Agrupación Especial Ateneísta Ángel Garma siempre en estrecha colaboración con la Agrupación Agustín Argüelles en un trabajo incesante por esa recuperación histórica que tanto se merecen los que nos precedieron.
Belén Rico
Directora Área Estudios Sociales Arco Europeo Progresista